Por qué elegir Menorca?
Prácticamente se ha mantenido igual que hace 30 años: playas verdes, libres y salvajes, gente amable y hospitalaria, comida genuina, todo fantástico. En la isla hay agua, pastos y obviamente mucho mar. Los servicios son excelentes y el servicio de autobuses cubre toda la isla. Hay carriles bici, caminos impecables y limpios, no hay playas concurridas. Menorca siempre ha sido frecuentada por el turismo familiar, pero los niños han crecido y hoy "los nostálgicos" vuelven a la isla con la misma filosofía practicada durante años por sus padres: amor por la naturaleza, respeto por la medio ambiente, saber vivir en armonía y paz con todos. Quienes vienen a Menorca lo hacen porque aman la isla, sus habitantes, las tradiciones y ese microclima templado, propio de una isla situada en el centro del Mediterráneo. No hay playas acondicionadas, el 95% de las mismas mencionadas son gratuitas, seguras, perfectas para niños, de aguas poco profundas y cristalinas. Los supermercados ofrecen un